01 abril, 2009

Los líderes de las 20 naciones más poderosas se encontraban reunidos para evitar el derrumbe del sistema económico mundial. El Maestro que se encontraba en medio de una manifestación de preocupados ciudadanos, fue reconocido por uno de los anfitriones y le invitó a unirse al debate.
Luego de escuchar durante horas todas las distinguidas disertaciones, uno de los 20 le preguntó al Maestro:“¿Qué propondría una persona como Ud. para resolver esta seria situación?”
“Hace más de 2000 años un emperador preguntó lo mismo, ¿sabía usted?”, dijo el Maestro.
”¿Y cuál fue la respuesta?”, reclamó con prepotencia el funcionario.
“Muy simple. Si gastas menos te quedará más.”, respuesta que fue saludada con varias sonrisas de los demás asistentes. Entonces sintiéndose burlado el importante Mandatario, le inquirió: “¿Qué calificaciones tiene Ud. para tomar parte de esta importante Junta?”
“Se meditar, se esperar y se ayunar.” “En mi vida he escuchado algo más absurdo!”

Y ante la frustración de entendimiento, el Maestro añadió con suma serenidad: “Saber hablar es bueno, pero saber pensar es mejor. Tener inteligencia es bueno, pero tener paciencia es mucho mejor. Alcanzar el poder es bueno, pero el autocontrol te da más poder” Embargado por el orgullo, el hombre finalmente dijo: “No es capaz usted de decir algo que tenga más sentido?”
 “Claro! Si aquel árbol viejo y seco, señalando uno que yacía derrumbado en la calle, se hubiera mantenido allí, los pájaros que vivían en él no se hubieran visto obligados a abandonarlo y volar por nuevos bosques, hasta encontrar otros árboles llenos de frutas para compartir con otros pájaros.”
 Y dado que esta respuesta resultó muy confusa para muchos, señalando la ventana y a los manifestantes, exclamó:
“Si estáis calificados para entender, aprended de los pájaros.”